Raymond Abreu ha sido una muestra de perseverancia, trabajo y dedicación en el mundo del béisbol el cual día tras día es más difícil y competitivo.
Ya lleva dos años siendo gerente general del equipo de béisbol de invierno Toros del Este, dejando ver su gran valor y potencial de trabajo, siempre en acción poniendo todo en orden para que el equipo taurino avance.
Se podría catalogar como el mejor gerente de la Liga en estos dos años: el equipo pasó a la Serie Final la temporada pasada y, luego una pequeña debacle al principio, en esta campaña ya se encuentran clasificados al Round Robin.
Ha hecho los movimientos necesarios en todos los aspectos: pitcheo, bateo, defensa. En ningún momento se ha dormido en los laureles y, conjuntamente con su equipo de trabajo, han dado lo mejor de sí por el team naranja.
Siempre amable y abierto a todo el que se le acerca, nos dispusimos a hacerle unas preguntas en exclusiva para Deporvida.net a lo cual accedió con mucho gusto.
¿Cómo te sientes trabajando junto al conjunto de los Toros del Este?
“Me siento muy contento del apoyo de la directiva, de los fanáticos de La Romana. Me han acogido, me han apoyado, me han dado la libertad de poder trabajar y hasta el momento de hoy, ahí están los resultados a través de la confianza que me han dado yo me siento muy satisfecho y muy contento de pertenecer a lo que es hoy en día los Toros del Este”.
Al principio comenzaron con mal record, pero después de ahí el equipo ha dado un cambio, ¿qué trabajaron ustedes en el clubhouse con los jugadores?
“Fíjate, eso es normal en la pelota que es tan corta, como la Liga de Invierno. Es una pelota de rachas. Nosotros entendíamos del trabajo que se hizo temprano, desde marzo, que el equipo iba a estar ahí, que iba a tener éxito; entonces lo que estábamos era teniendo un poquito de paciencia, de no mortificarnos por la situación que estaba pasando, que fue desagradable porque fue al principio. Pero verdaderamente los muchachos que estaban bastante acoplados desde el año pasado han hecho tremendo trabajo, son unos guerreros, saben lo que es la meta final de nosotros y hasta el día de hoy están entregados a la causa”.
¿Cómo es trabajar con jugadores ya adultos, el manejo de los caracteres de cada uno, su forma de ser?
Cada persona tiene una personalidad muy diferente, temperamentos diferentes, pero yo creo que cuando tú eres profesional y los trata con respeto eso es recíproco, el respeto es mutuo. Mido el esfuerzo que ellos hacen para llegar donde están ahora”.
Estar con el conjunto de los Atléticos de Oakland aquí en el país y formar parte de los Toros del Este te aporta más conocimientos, ¿eso te ayuda a manejar mejor ambos conjuntos?
“Sí, bastante. Sí, tengo doble trabajo hoy en día en la Liga de Invierno, gracias a Dios, que me ha dado la fuerza y la sabiduría para esto. Es algo que con el tiempo que uno tiene en pelota sigue aprendiendo. Imagínate, vengo de una escuela que es los Atléticos de Oakland, que hoy en día me ha dado la posibilidad de desarrollarme y ustedes ven como uno maneja, trabaja y los resultados”.
“Uno siempre tiene que estar sentado, esperando, aprendiendo, las orejas abiertas, nunca diciendo que no, reinventándose, pero al fin y al cabo de todo uno tiene que terminar siendo un profesor, enseñándole a los muchachos jóvenes lo que uno ha aprendido en el tiempo que tiene trabajando”, así se expresó sobre su gran éxito en este mundo del béisbol.
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