Ramírez y Carty fueron exaltados al Salón de la Fama

De los Guardianes de Cleveland y los Bravos de Atlanta, respectivamente

Los dominicanos Manny Ramírez y Rico Carty fueron exaltados el pasado sábado al Salón de la Fama de los Guardianes de Cleveland y los Bravos de Atlanta en el marco de dos ceremonias que se realizaron previo a los partidos donde sus otroras equipos recibieron la visita de los Tigres de Detroit, en el Progressive Field, y a los Gigantes de San Francisco, en el Truist Park, respectivamente.


 

Manny Ramírez

Manny Ramírez
Manny Ramírez

 

Ramírez jugó con el equipo de Cleveland de 1993 al 2000, tras ser seleccionado por el club en el Draft amateur de 1991 desde la George Washington High School de Nueva York.

En su tiempo con Cleveland, participó en dos Series Mundiales (1995 y 1997) y cuatro Juegos de Estrellas (1995, 1998, 1999, 2000), ganando tres Bates de Plata (1995, 1999, 2000).

En sus ocho temporadas con el club, Ramírez participó en 967 juegos, 4,095 apariciones al plato, 3,470 turnos oficiales, bateó para promedio de .313, con 236 jonrones y 804 empujadas, 665 anotadas, 1,086 hits, 237 dobles, 11 triples, 484 extrabases, 2,053 bases alcanzadas, 28 bases robadas, 541 bases por bolas, 780 ponches, OBP .407, SLG .592, OPS .998, OPS+ 152.

Ramírez es el líder de todos los tiempos de la franquicia en slugging (.592), OPS (.998), cuarto en porcentaje de embasarse (.407), octavo en impulsadas (804) y noveno en extrabases (484).

Sus 165 vueltas remolcadas en 1999 también representan un récord del equipo y para jugadores latinos en las Grandes Ligas.


 

Rico Carty

Rico Carty
Rico Carty

 

Rico, oriundo de San Pedro de Macorís y quien cumplirá 84 años el próximo 1 de septiembre, fue uno de los grandes bateadores dominicanos en las Grandes Ligas en las décadas de los 60s y 70s y compartirá uno de los máximos honores de la franquicia con Fred Tenney, quien jugó 15 campañas con los Boston Braves desde 1894 hasta 1907.

Carty fue popularmente con los fanáticos de los Braves y jugó con dicho equipo desde 1963 hasta 1972. En su carrera tuvo un promedio de bateo de .317 que lo coloca en la sexta posición en la historia de la franquicia y empatado en primero en la era del equipo en Atlanta.

También la organización destacó que mantiene el WAR más alto para un jardinero izquierdo en la historia del equipo y fue elegido para el Juego de Estrellas de 1970, en una temporada en la que bateó para .366, lo que le coloca como el average más alto en la historia de Atlanta.

Rico Carty será el primer dominicano en llegar al Salón de la Fama de los Braves, que actualmente cuenta con 38 leyendas entre las que se encuentran Hank Aaron, Greg Maddux, Andruw Jones y otros.

En su carrera de quince temporadas y 1,651 partidos en las Grandes Ligas, Carty disparó 204 cuadrangulares dejando una línea ofensiva de .299/.369/464, creando fama como uno de los bateadores más temibles con dos strikes en su cuenta.

En la liga dominicana también se destacó disparando 70 cuadrangulares y jugando en otros circuitos invernales. También fue exaltado al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano en el ceremonial del año 1989.


Palabras de Manny Ramírez

«Hoy es un día muy especial para mi familia y para mí. Hoy los Guardianes de Cleveland, los antiguos Indios, me honran de una manera especial, en introducirme a mí en el Salón de la Fama, un gran equipo y una gran ciudad.

En esta gran ciudad y equipo comencé mi carrera llena de sueños, un joven inquieto y con ganas de demostrar lo que había en mí, y lo que yo podía hacer en el béisbol.

En nombre mío y de mi familia, agradezco a Dios primeramente y a los Guardianes de Cleveland, a sus ejecutivos por este gran honor que me hacen hoy.

Le doy gracias por reconocer mi bate, mis números fueron hechos en el terreno de juego y no con mi vida privada.

Todos cometemos errores, y mucho más en la juventud, nadie es perfecto, ya que el único perfecto es el señor Jesucristo y muchos peloteros que dejaron todas sus fuerzas en el terreno de juego, y que como yo han puesto números para ser reconocidos, hoy sus números del terreno son opacado por los errores cometidos fuera del terreno.

Gracias a todos los integrantes de este gran equipo de los Guardianes de Cleveland, y a todo su staff y equipo de trabajo.

También le doy gracias a Dios por todos los buenos compañeros que puso alrededor mío aquí en Cleveland: Baerga, Sandy Alomar, Dave Winfield, Eddie Murray, Roberto Alomar, Julián Tavárez uno de mis mejores amigos aquí en Cleveland, buen compañero que me apoyó en muchas circunstancias.

También me pasó lo mismo cuando estuve en Boston, tuve buenos camperos como David Ortiz, Pedro Martínez, quienes estuvieron conmigo en las buenas y en las malas y siempre tuvieron sus puertas abiertas para mí.

También agradecer a mi esposa Julianna, que ha estado conmigo en las buenas y en las malas, y también le doy gracias a Dios por mi mamá, que gracias a Dios le dio un hijo que es uno de los mejores bateadores derechos que ha existido, no sé si soy el mejor, pero los números hablan por sí solos.

También le doy gracias a Dios que me ha hecho entender que todo en la vida es pasajero, y que todo lo eterno es lo que él nos ofrece, que es la vida eterna. Yo no me merecía nada de eso, porque yo no lo andaba buscando, pero Dios si me estaba buscando como oveja perdida, porque la Biblia dice que Jesucristo vino a buscar lo que se había pérdido, y yo era uno de esos que estaba perdido, pero por su gracia, su misericordia y amor, fui encontrado.

La Biblia dice también que cada vez que un hombre se arrepiente hay fiesta en el cielo, y le doy gracias a Dios por eso».


Palabras de Rico Carty

«Me siento muy honrado con esta gran distinción de los Bravos de Atlanta hacia mi persona. Comparto este reconocimiento con mi familia y todo el pueblo dominicano. Gracias a la organización de los Bravos, a sus directivos, sus jugadores y toda su fanaticada por siempre apoyarme y brindarme tanto cariño, tanto en mi época de jugador activo como después de mi retiro. Gracias de corazón a todos. Que Dios me lo bendiga a cada uno de ustedes».

Hector Gomez
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