Refugiados: Drama humanitario

 La crisis que se ha originado en Europa con los migrantes que huyen despavoridos de las guerras civiles  y regímenes opresores de Siria y sus alrededores ha generado un caos de dimensiones inesperadas.

Miles de mujeres, ancianos y niños se embarcan a la aventura de huir buscando re localizarse en una tierra de paz; los hombres que cada vez son menos hacen lo imposible por llegar a un destino que aunque desconocido es mejor que la pesadilla que vivir bajo bombardeos.

Desde que inició el conflicto en Siria, la comunidad internacional, se ha limitado en ver con recelo la cruda realidad, que agudiza conforme pasan los días. Así, como se documenta en Las Sagradas escrituras, las migraciones son parte de los ciclos que viven los pueblos y sociedades en el contexto histórico, económico, político y social. La constante de esos países ubicados en zonas de conflicto, que son la mayoría de las veces por disputas territoriales, se extrema cuando la sociedad civil recibe maltratos y vejaciones de quienes lideran sus territorios.

La más reciente tragedia aconteció en el Mar Egeo, cuando una embarcación se hundió con 34 personas que iban rumbo a Grecia, justo frente a la isla de Farmakonisi. En dicha embarcación se confirmó que iban a bordo criaturas de pocos meses de nacidos.

El drama es tal que a pesar que hay pactos que permiten el libre tránsito en  zonas limítrofes y fronterizas, específicamente unas 26 naciones  firmaron el acuerdo de Schengen, no hay manera de controlar el flujo masivo de migrantes. El acuerdo, consiste en que pueden circular libremente sin que haya en principio necesidad de llenar un registro de ingreso a los 22 países pertenecientes a la Unión Europea dentro del pacto.

Dado a  ese mar humano que se avalancha a tierras de oportunidades de supervivencia, Alemania se ha visto en la necesidad de poner mayores controles en  su frontera con Austria y de igual manera Múnich. Y, no se trata de que llegan docenas, sino miles de refugiados sin dinero, familiares donde llegar y para variar  las barreras del idioma. El  gobierno  Alemán, ha fijado al igual que Francia y España una posición de apoyo y acogida a los migrantes, pero tras la estampida humana que los invade, ha sido necesario establecer una logística sobre el proceso que a parte de delicado es necesario para evitar que se cuelen delincuentes y terroristas.

Esta emergencia humanitaria, no se puede visualizar como el simple auxilio que requieren esas miles de personas. Hay que establecer acuerdos entre naciones, que involucren organizaciones como ONU, OEA, Derechos Humanos, UNICEF,  etc; para garantizar que junto a Interpol haya una mística de acogida para los seres humanos que las naciones que abren sus puertas a los migrantes no tengan un nido de ladrones, delincuentes y violadores dentro de sus territorios. No es que mi punto de vista sea inhumano, es que personas no gratas las  hay en todo el globo terráqueo y hay que evitar llevar otros problemas a los que ya tienen las naciones que dan acogida a los migrantes.

Es responsabilidad de los estados que albergan refugiados, asegurarse que pueden acoger migrantes, no se puede alegremente decir tengo espacio para 10 mil o 5 mil, hay que presentar un plan de compromiso de los años que se puedan habilitar viviendas o familias que darían posada a los afectados por esa crisis que ha dejado al mundo sin palabras.

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